sábado, 4 de junio de 2011

José Manuel Balta. De lunes a Marte. Lima: Casatomada, 2011. 84 pp.



José Manuel Balta. De lunes a Marte. Lima: Casatomada, 2011. 84 pp.

José Manuel Balta (Lima, 1982) nos entrega su opera prima. Balta ha decidido transitar por los caminos de la fantasía y la cf en este libro de cuentos. El cuento que da nombre al libro se mueve dentro de los objetos mágicos. En este caso, un viejo baúl que contiene un manuscrito. El texto anuncia las causas por las cuales ese otro mundo llegó a su fin. El personaje hará todo lo posible para advertir el peligro (contaminación, Tercera Guerra Mundial) pero será inevitable. Hay un alegato ecológico y una tendencia hacia lo “políticamente correcto”. Esta última característica aparecerá en otros de los relatos, que hacen que éstos resulten algo previsibles.

“La habitación clausurada” contiene una atmósfera extraña y de terror que se va diluyendo para dar paso a la cf. El final abierto del relato le da mayor poder dentro de la fantasía. “La condena del ermitaño” y “El manzano” parecen contener imágenes de La fuente de la vida de Aronofsky (en la metamorfosis del hombre en vegetal y en la fuente en sí); en “Micaela”, parece haberse influenciado en el film Martín de George Romero, no solo por el mismo nombre del personaje sino por la temática del doble.

Otros relatos son de construcción mítica (“La hija del mar”, “El estruendo de los Amaruru”) o de la propia cf (“El umbral del universo”, “El pájaro humano”). Quizás los mejores relatos sean los de menor extensión, en donde el autor puede condensar mejor los elementos propios de lo fantástico y la fantasía (“El torturador” es uno de los mejores del libro). Llama la atención no solo que muchos de los personajes estén a caballo entre la adolescencia y juventud, más aún, que se reiteren ciertas imágenes de la vida cotidiana, que desmerecen en algo el sentido de los relatos. Pese a ello, no dudamos en señalar que nos encontramos frente a un novel escritor de gran imaginación y potencial.

Elton Honores
Universidad San Ignacio de Loyola